Hoy en día el tema de la innovación turística y la llegada inminente de los fondos financieros que la apoyen se ha vuelto crucial, al encontrarse el sector fuertemente afectado por la pandemia. Desde este punto de vista, desde hace meses se ha venido incentivando a diversos sectores dentro de la industria turística para que logren a optar por los fondos de financiación que, entre otros, concede la Unión Europea.
En esta ocasión, Manuel Molina, presidente y CEO de TSS Group (compañía de intermediación turística centroeuropea que reúne más de 3.500 agencias de viaje), en el marco de la Cátedra de Innovación Turística de la Universidad de Málaga que lleva su nombre, comparte algunas reflexiones sobre los aspectos más importantes que, según su punto de vista, deben considerarse a la hora de renovar, reinventar y solicitar inversiones en este ámbito.
En primer lugar, según Manuel Molina, la innovación no debería asociarse únicamente a la variable tecnológica. La tecnología es un elemento muy importante para la modernización del sector, al igual que la sostenibilidad, pero el elemento clave para afrontar estos meses difíciles y salir de ellos con un negocio próspero es la inversión en las personas. Los recursos humanos que se encuentran involucrados en los procesos productivos de la industria turística deben renovarse y reinventarse al igual que las infraestructuras o las herramientas de las que tanto se habla. “La innovación debe llegar a todos los ámbitos del proceso productivo, incluidas las personas, puesto que ésta es la mejor inversión en el futuro” – asegura el Presidente y CEO de TSS Group, apostar por las personas en esta era de transición digital, supondrá diseñar una industria turística moderna, sostenible y segura.
A partir de ahí, manifiesta que las empresas turísticas tienen la esperanza de que las ayudas que lleguen con los fondos recaigan especialmente en el sector privado, al ser éste el que acelera la modernización, genera puestos de trabajo, etc. Para ello sería necesario promover las relaciones internacionales entre las compañías, creando consorcios y alianzas estratégicas.
Por otro lado, a pesar de las oportunidades de modernización empresarial que suponen estos fondos de financiación, se debe tener muy claro que estas ayudas no están destinadas a solventar los problemas de liquidez, destacando Molina que “los fondos que llegarán estarán enfocados en temas como la digitalización o la sostenibilidad, que, sin duda son aspectos muy importantes, pero si además las ayudas remediaran los problemas de solvencia, supondría un paso firme e inteligente para respaldar a las empresas en esta crisis.”
Tratando el tema de las tecnologías, en cuyo desarrollo se focalizarán las ayudas, la respuesta de Molina está clara – “El móvil ha supuesto una revolución en todos los aspectos de vida, este dispositivo ha dado una nueva vida a todas las personas, incluso a los mayores, que también se acercan cada vez más a dicha tecnología. El móvil es presente y futuro y es ahí donde hay que invertir preferentemente. La gente se acuesta y se levanta con el móvil en la mano”, por lo cual resultará esencial para los operadores turísticos adoptar las formas de construir nuevas relaciones con los consumidores por medio del este soporte, insiste Manuel Molina.
Por último, abordando la cuestión del sector académico, el empresario hace hincapié en la importancia de la investigación en el turismo. Desde este punto de vista, asegura que resulta esencial aumentar la inversión en las investigaciones vinculadas con el sector y que protagonizan en gran medida las universidades. “Si queremos tener en el futuro un turismo que funcione y sea sostenible, hay que invertir en su investigación ahora.”
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